La experiencia de Valentina
Hace
cosa de dos años me escribió Valentina, una joven chilena que, junto a unos amigos, había protagonizado
una experiencia paranormal dentro del Parque Nacional Alerce Andino, en la Décima
Región de Chile. Valentina
llegó a mí a través de un post que publiqué en este mismo blog, ya que a partir de aquel episodio suyo se
dedicó a buscar testimonios similares y a ampliar su información sobre el enigmático lugar. Precisamente mi relato hablaba de algunos fenómenos extraños que ocurrirían allí.
Como le manifesté a Valentina en aquella oportunidad, personalmente no fui testigo de ningún suceso paranormal durante mis dos visitas a ese hermoso santuario natural. Aunque no hizo falta, aquel entorno de selva brumosa e impenetrable me despertó las más extrañas fantasías. Fantasías alimentadas, también, por un dato inquietante: dentro del parque hay un diminuto lago llamado Sargazo, al igual que el inmóvil y misterioso mar ubicado dentro del tristemente célebre Triángulo de las Bermudas.
Como le manifesté a Valentina en aquella oportunidad, personalmente no fui testigo de ningún suceso paranormal durante mis dos visitas a ese hermoso santuario natural. Aunque no hizo falta, aquel entorno de selva brumosa e impenetrable me despertó las más extrañas fantasías. Fantasías alimentadas, también, por un dato inquietante: dentro del parque hay un diminuto lago llamado Sargazo, al igual que el inmóvil y misterioso mar ubicado dentro del tristemente célebre Triángulo de las Bermudas.
La
historia de Valentina llegó finalmente a oídos de la gente del canal de YouTube Relatos de Horror, quienes la subieron a la web en forma de video. Sobre el final del
mismo también hacen mención a mi informe, y en la descripción general figura el enlace. Dicho sea de paso, es un honor que lo hayan calificado de "interesante".
Aquí
está el relato. Espero que los atrape como lo hizo conmigo desde el primer
momento.
En facebook: https://www.facebook.com/RelatosDeHorrorMX
Comentarios
http://patagoniahielos.blogspot.com.ar/
Un abrazo,
Demetrio
De a poquito iré leyendo tu blog, que, por lo poco que vi, parece muy interesante. Justo cuando te iba a comentar que existía un cerro con tu nombre, advertí que ya estabas enterado y habías hecho un post al respecto.
Abrazo patagónico.